Aprendizaje: Una conexión profunda.
"El aprendizaje no es amontonamiento sucesivo de cosas que se van reuniendo sino que se trata de una red o trama de interacciones neuronales muy complejas y dinámicas que van creando estados generales cualitativamente nuevos en el cerebro humano." (Placer y ternura en la educación. Asmman, pag 39).
Este proceso interior que manifiesta Assman, ha implicado años de evolución, donde partículas de energía inteligentes en colaboración unas con otras han dado forma a lo que hoy somos.
Pero la afirmación de Asmman validada por diferentes científicos es provocadora en sí misma, ya que agrega una idea fundamental para entender que es aprendizaje, y es la idea de crear. -Esta idea implica dejar de percibirme como sujeto receptor y acumulador de ideas y de conceptos, para entenderme como creador y co-creador de nuevas posibilidades de conocimiento conllevándome a generar nuevas re-configuraciones cerebrales. Pero para dar ese salto cuántico donde nos entendamos simplemente como receptores pasivos de cosas, es necesario soltar nuestras propias ataduras mentales, abrirnos a nuevas posibilidades y comprendernos como un todo interconectado, manifestación de un cosmos dinámico que fluye a través de nosotros(as) y a la vez de todos los seres sintientes-
Sin embargo, la compresión del aprendizaje a la cual nos invita la vida , va más allá de un simple proceso cerebral, sus implicaciones permean toda nuestra existencia, implica comprender que todos los seres en conexión permanente con su medio, están viviendo un proceso de aprendizaje, interactuando y generando conocimientos constantemente. Millones de células en red colaborativa aprenden a relacionarse con su entorno, adaptándose y mutando, dependiendo de su necesidad, auto-produciéndose, auto-organizándose en sistemas complejos y autopoieticos.
Lo expuesto anteriormente me condujo a entender el aprendizaje , como un proceso relacional y auto-organizativo, que debe conducir necesariamente a nuevas formas de ser, de sentir y estar en el mundo. En ese orden de ideas debo estar redes-cubriéndome en mi actuar cotidiano, ya que el aprender es un proceso dinámico e inacabado, conduciéndome constantemente a nuevos interrogantes e intuiciones que van más allá del simple ejercicio racional-. Estas formas de entender el aprendizaje están impregnadas del gozo, la felicidad y la posibilidad de la pregunta.
Estas formas de compresión y apropiación del aprendizaje han sido mutiladas por los sistemas tradicionales de educación; la uniformidad, el control y la seguridad se conjugaron para asesinar la posibilidad de la incertidumbre, la auto-organización y el derecho a preguntar. Las nuevas formas de ser le dan paso a la construcción de conocimientos y aprendizajes desde lo colectivo, permitiéndome a través de nuevas preguntas a curiosear e indagar de manera creativa por nuevas posibilidades.
Pero es claro que estas nuevas formas de aprender cobran sentido en relación permanente con el otro (a), no como una isla aparte sino generando las sinergias que permitan que a través de nuevos lenguajeos, el vivir se convierta en un con-vivir de la mano con aquella persona que aunque diversa y pluripensante está en la búsqueda de su propia humanización.
Qué estén bien, felices y libres de sufrimiento.
Amituofo!